La urticaria solar es una fotodermatosis poco común que provoca lesiones en la piel, como enrojecimiento, picor y ronchas, minutos después de la exposición a la luz solar. Aunque se considera poco común en la población general, los expertos sugieren que puede ser infradiagnosticada debido a la falta de reconocimiento de sus síntomas.
Síntomas de la Urticaria Solar
La urticaria solar se manifiesta rápidamente, generalmente pocos minutos tras la exposición a la luz solar. Los síntomas incluyen:
- Enrojecimiento de la piel: Se observa una coloración roja en las áreas expuestas al sol.
- Ronchas o habones: Lesiones elevadas en la piel que pueden variar en tamaño.
- Picor intenso: Sensación de picazón en las áreas afectadas.
En algunos casos, las lesiones pueden aparecer horas después de la exposición solar. La gravedad de los síntomas generalmente aumenta con la intensidad de la exposición solar. Las zonas más afectadas son aquellas expuestas directamente al sol, como el torax, la nuca y los hombros. Sin embargo, en la cara y las manos, a menudo se observa un fenómeno de tolerancia a la luz debido a la exposición constante a lo largo de la vida, que hace que la piel sea menos reactiva.
Diagnóstico Diferencial
Es crucial diferenciar la urticaria solar de otras afecciones cutáneas para poder proporcionar un tratamiento adecuado. Algunas condiciones con síntomas similares incluyen:
- Quemaduras solares comunes: La urticaria solar aparece en minutos después de la exposición a rayos solares, mientras que las quemaduras solares se desarrollan más lentamente, generalmente horas después de la exposición.
- Fotodermatosis secundarias por medicamentos: Ciertos medicamentos pueden causar quemaduras en la piel al exponerse al sol, especialmente en personas mayores o multimedicadas
- Erupción Polimorfa Lumínica (E.P.L): Es una reacción cutánea inducida por el sol, que puede manifestarse de diferentes formas clínicas. Generalmente aparece en la primavera o comienzos del verano al exponerse al sol partes del cuerpo que suelen estar cubiertas el resto del año.
- Lupus: Es una enfermedad autoimmune que puede manifestarse en forma de sarpullido irregular en las áreas de la piel que están expuestas a la luz solar.
- Prurigo actínico: Afecta principalmente a personas mayores y se manifiesta como una reacción exagerada de la piel a la radiación solar, generalmente acompañado de engrosamiento de esta.
Prevención ante la radiación solar
La prevención es clave para combatir la urticaria solar. Algunas medidas preventivas incluyen:
- Uso de protección solar alta: Aplicar cremas con un alto factor de protección solar (FPS), 30 minutos antes.
- Evitar la exposición prolongada al sol: Limitar el tiempo de exposición directa a la luz solar, especialmente durante las horas pico de radiación.
- Ropa protectora: Usar ropa que cubra la mayor parte del cuerpo, sombreros de ala ancha y gafas de sol.
- Consulta con un dermatólogo: Para una evaluación y tratamiento adecuados, es aconsejable buscar la opinión de un especialista.
Aunque la urticaria solar es una condición poco común, es importante estar informados sobre sus síntomas y tratamientos para detectarla y abordarla adecuadamente. Proteger nuestra piel y ser conscientes de cómo reacciona a la luz solar puede mejorar significativamente la calidad de vida de quienes padecen esta condición.
Para más información sobre cómo proteger tu piel del sol consulta la Unidad de Dermatología de CreuBlanca.