• Los nuevos dispositivos cardíacos permiten realizar la resonancia magnética de forma segura, garantizando así el mínimo riesgo y siempre priorizando la salud del paciente.

Cualquier persona que se realiza una resonancia magnética sabe que tiene que tener en cuenta una serie de indicaciones, entre ellas, no llevar objetos metálicos. Esto es debido a que los equipos de resonancia magnética utilizan potentes imanes que atraen la presencia de metales, lo que puede suponer un riesgo tanto para la salud de las personas como para el funcionamiento de los equipos.

Pero, ¿qué ocurre cuando alguien no puede quitarse un objeto metálico, como por ejemplo un marcapasos? Cada vez son más las personas que llevan implantado este tipo de dispositivos cardíacos electrónicos para corregir un ritmo cardíaco lento o irregular.

En CreuBlanca, la exploración se lleva a cabo mediante el equipo RMN Orian (Toshiba) de 1,5 teslas, situado junto al Servicio de Urgencias 24h, con el fin de minimizar riesgos y actuar con la máxima rapidez en caso de emergencia, explica el Dr. Xavier Alomar, responsable de Investigación, Desarrollo e Innovación (I+D+i) y director de la Unidad de Diagnóstico por la Imagen de CreuBlanca.

Dispositivos cardíacos compatibles con RMN

Los marcapasos varían en función de su objetivo terapéutico, material y dimensiones, sin embargo, cuentan con dos denominadores comunes: son subcutáneos, es decir, se implantan debajo de la piel, por lo que es necesario someterse a una intervención para retirarlos; y, por otro lado, los electrodos que conectan el marcapasos con el corazón llevan componentes ferromagnéticos, por ello, durante muchos años han sido incompatibles con la resonancia, causando grandes complicaciones y pudiendo poner en riesgo la salud del paciente, especialmente en pacientes dependientes de marcapasos.

Entre las complicaciones más destacadas encontramos el sobrecalentamiento del electrodo, alteraciones del umbral de estimulación y alteraciones en la detección del latido cardiaco, explica el Dr. Julio Martí, cardiólogo de CreuBlanca especialista en electrofisiología y arritmias.

Actualmente, gracias a los últimos avances tecnológicos, la mayoría de los dispositivos cardíacos electrónicos que se implantan son compatibles con la resonancia magnética, es decir, permiten realizar la exploración de forma segura, garantizando así el mínimo riesgo y siempre teniendo como prioridad la salud del paciente.

En la Unidad de Arritmias de CreuBlanca implantamos marcapasos que incorporan dos modos en su funcionamiento: modo normal y modo RMN compatible. En este segundo modo, el marcapasos deja de funcionar temporalmente y así no interfiere en la realización de la prueba diagnóstica, sin que implique ningún riesgo para el paciente”, explica el Dr. Julio Martí, cardiólogo de CreuBlanca especialista en electrofisiología y arritmias.

Circuito diagnóstico exclusivo para pacientes con marcapasos

Pero, ¿cómo podemos saber si nuestro dispositivo cumple los requisitos de compatibilidad con la resonancia? El médico es el responsable de dejar reflejado en el informe del paciente si el marcapasos es compatible o no, así como el modelo y las características del dispositivo. No obstante, antes de someterse a la prueba, hay varias recomendaciones a tener en cuenta para evitar cualquier problema.

En primer lugar, resulta imprescindible informar al especialista que prescribe la resonancia que somos portadores de un marcapasos, mostrándole el informe del implante, donde debería constar si es compatible con esta prueba. En el caso de que no lo sea, el médico tomará las alternativas que considere adecuadas. Ante la duda sobre la compatibilidad del dispositivo, el paciente deberá pedir cita con un especialista de nuestra Unidad de Cardiología y facilitar la tarjeta europea de identificación. Por último, una vez demostrado que el marcapasos es compatible, el paciente debe programar la cita de la resonancia en coordinación con el equipo de cardiología, ya que será necesario realizar una serie de ajustes en el dispositivo antes y después de la prueba.

En CreuBlanca, disponemos de un circuito cerrado para atender exclusivamente a pacientes con marcapasos. Antes y después de la prueba, nuestro equipo de cardiólogos visitan al paciente y le realizan una serie de ajustes en el dispositivo para la adecuada realización de la exploración, por lo que en todo momento está controlado. Nuestro principal objetivo es ofrecer un diagnóstico de calidad mediante los procesos más innovadores, siempre con el mejor trato médico y humano.