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¿Qué falla en el diagnóstico de lesiones isquiotibiales que conduce a recaídas?
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¿Por qué la ecografía no resulta cien por cien fidedigna en el diagnóstico de fracturas musculares durante las primeras horas tras la lesión?
A raíz de las recientes molestias isquiotibiales que sufren jugadores como Lionel Messi, Ousmane Dembele o Youssef En Nesyri, el doctor Xavier Alomar, responsable del Departamento de Diagnóstico por la Imagen de CreuBlanca, informa sobre la utilidad de la Resonancia Magnética 3 Teslas en el diagnóstico precoz de este tipo de fracturas para acelerar la vuelta a la competición en deportistas.
En la imagen, podemos observar una flecha que indica la localización de la rotura del músculo semimembranoso con retracción. Cuando el músculo toma forma de acordeón indica que ha perdido tensión.
Los isquiotibiales son un conjunto de músculos que se encuentran en la parte posterior del muslo. En concreto, se componen de tres músculos: el semitendinoso, el semimembranoso y el bíceps femoral. Estos se insertan en la tuberosidad isquiática de la pelvis y se extienden hasta la parte interna o externa de la tibia.
“Los músculos isquiotibiales se componen de un tendón, una parte miotendinosa, que sirve de unión entre el tendón y el músculo, y una parte muscular”, apunta el doctor Xavier Alomar, Responsable de Investigación, Desarrollo e Innovación (I+D+i) y Director del Departamento de Diagnóstico por la Imagen de CreuBlanca.
“Las fracturas pueden producirse en cualquier de estas tres partes. De forma que resulta imprescindible diferenciarlas bien, ya que el pronóstico y el ‘return to play’ cambiará según la localización de la fractura y el tamaño de la misma”, añade Alomar.
Tiempo de recuperación
“Una rotura muscular implicará alrededor de 15 días de baja, una fractura miotendinosa entre 4 y 5 semanas y una fractura tendinosa puede prolongarse hasta 8 o 9 semanas”, destaca Alomar.
La elongación o extensión brusca del músculo semimembranoso puede derivar en este tipo de lesiones isquiotibiales. “Es un músculo que habitualmente se rompe cuando se realiza un exceso de estiramiento de la pierna, es decir, primero se flexiona la cadera y seguidamente se estira la rodilla”, explica.
Diagnóstico por ecografía: ¿por qué no es del todo fidedigna?
“La ecografía ve los sangrados, es decir, la sangre que sale de la fractura, por lo que muchas veces no es posible ver con claridad la propia lesión”, apunta Alomar.
“Se recomienda realizarla transcurridas entre 24 y 48 horas después de haberse producido la lesión. Si se realiza al momento de producirse la fractura no acostumbra a dar una información o resultado totalmente fidedigno, pudiendo infradiagnosticar fracturas”, advierte.
Diagnóstico por Resonancia Magnética 3 Teslas
La prueba para el diagnóstico de este tipo de lesiones es por excelencia la Resonancia Magnética 3 Teslas. “Esta puede realizarse inmediatamente después de la fractura, o bien entre los primeros 2 y 5 días”, apunta Alomar.
El estudio de estructuras tendinosas de tejido conectivo o fibrótico de tamaño muy pequeño requiere de equipos de alta potencia para obtener imágenes de alta resolución y cortes con mayor resolución espacial.
“Tengamos en cuenta que se trata de roturas de tamaño muy reducido, de 3 o 4 mm con agujeros o una profundidad de 1 cm. Se trata de estructuras que aguantan mucha fuerza, pero son de un tamaño muy reducido”, declara.